miércoles, 28 de abril de 2010

ORDEN DE LA HISTORIA



PARTE I: GUYBRUSH THOMES

Esta primera parte empezará con un escrito en el que el mismo Guy se dirige al lector y se le presentara (Falta por desarrollar). Después tendrá los textos ya escritos, "Su rutina" y "La antigua Colt y el oro maya".

PARTE II: SENTIMIENTOS

En esta parte se incluirán los textos: "Charlando con el sol del pasado" y "Sentimientos escondidos".

PARTE III: CENTRO DE ESTUDIOS "IN MEMORIAM" AL DOCTOR THOMES

En la tercera parte se usaran los textos "Viaje a Alejandría" y "Con Gabriel, rumbo a Alejandría". Además se creara otro que narre algunas experiencias de Guy en el centro de estudios.

PARTE IV: EL VIAJE

En esta parte usaré los textos: "INT. EXT. BAR DEL HOTEL RUSSELL. NOCHE" y "El Comienzo".

PARTE V: EL DORADO

Para la parte final se creara un texto que narre la llegada de Guy a "El Dorado" y los acontecimientos que finalizan la historia.

miércoles, 21 de abril de 2010

EL COMIENZO



Por fin estoy aquí, a escasos días de comenzar mi primera expedición. La verdad en algún momento pensé que nunca llegaría este momento. Pero bueno, aquí estoy y lo importante es que todo resultara de la mejor manera posible.

El hombre que tanto me asustó esa noche en el Bar del Hotel Russell resultó ser lo que estaba esperando por mucho tiempo. Se presentó como Andrés Santacruz, dijo que me buscaba hace bastante tiempo, en verdad estaba buscando a mi padre. Pero cuando se dio cuenta que había fallecido, comenzó a investigarme, y dijo que “El Grupo” me había escogido para liderar la expedición. En ese momento yo estaba muy confundido, también asustado y además tenía varios tragos encima y la verdad no entendía nada de lo que este tipo me decía. A la mañana siguiente quedamos de encontrarnos en mi oficina y me contó todo detalladamente.

Resultó ser que mi padre y el de Andrés se conocían hace mucho, habían trabajado en algunas investigaciones arqueológicas en Suramérica, el resultado de estas investigaciones fue la posible ubicación de “El Dorado”, la ciudad que hasta ese entonces parecía ser una leyenda. Cuando la expedición en busca de esta “leyenda” estaba a punto de comenzar, surgieron algunos problemas en la zona de búsqueda que los obligaron a postergar esta expedición por un tiempo. Después de eso, mi padre murió, y ahora que todo estaba dado para encontrar “El Dorado”, “El Grupo” me quería en cabeza de la búsqueda.

El señor Santacruz era una persona muy adinerada, cabeza de un importante grupo económico en Suramérica y un entusiasta de la arqueología y la historia. Teniendo todo para patrocinar el que sería el mayor descubrimiento arqueológico del siglo en Suramérica, decidió que ser el hijo del brillante Doctor Thomes me daba la confianza necesaria para dirigir la expedición.

Sin dudar mucho acepté la propuesta, y me embarqué en la búsqueda de “El Dorado”.

Llegue a Bogotá, Colombia a comienzos de esta semana, me ofrecieron hospedaje en una casa de los Santacruz, situada en un lugar llamado La Candelaria. La ciudad es muy civilizada, muy diferente a lo que tenía en mente, es bastante moderna y organizada. Igual, mi estadía en Bogotá será bastante corta, alredor de dos semanas mientras completamos el grupo de la expedición y reunimos el equipo técnico y de transporte que necesitamos.

Tengo que señalar, las mujeres colombianas son hermosas, el día en que llegué, después de reunirme con Andrés y estudiar algunos aspirantes a participar en la expedición, fui a una librería de la Candelaria, allí conocí a una mujer extraordinaria, mientras tomaba un café y leía una revista, Jordana se llama. Su belleza es inmensa y muy peculiar, además es una mujer brillante, es profesora de Filosofía. Estoy tratando de convencerla para que me acompañe en la expedición, sería el apoyo que necesito en una labor tan importante. El hablar con ella me tranquiliza y me torna mas lucido. Anoche me llevó a un bar, El Desenlace, creo que se llama el lugar, allí le conté que deseaba que me acompañara en la expedición, le insinué sutilmente mis intenciones personales con ella. Estaba casi convencida del viaje cuando infortunadamente apareció un amigo de ella, Omar un tipo bastante extraño y a mi juicio un total perdedor que está totalmente enamorado de ella pero no tiene el coraje para decírselo, no entiendo en que forma, pero esté tipo la hizo a dudar. Omar no hacía sino tratar de opacarme toda la noche, intentaba fallidamente hacerme quedar mal, pero eso sería imposible para alguien como él. Lastimosamente le di ventaja porque me tuve que ir del lugar por una llamada urgente de Andrés, tuve que dejarlos solos y según creo, el tipo debió rogarle toda la noche para que no viajara, igual no importa, sé que Jordana se siente bastante atraída hacía mi y si no logro llevármela a la expedición, luego la buscaré, me ha cautivado realmente. Quedamos en vernos hoy para hablar un poco y me imagino, me dará su respuesta, espero que sea positiva, claro que con la insistencia de Omar, lo estoy dudando.

Finalmente en 2 días parto en busca del Dorado, finalizare el proyecto de mi padre exitosamente a como de lugar.

jueves, 15 de abril de 2010

CON GABRIEL, RUMBO A ALEJANDRÍA



Me levante muy temprano y con muchas energías ese día, después de la charla con el líder del Centro de Estudios In Memoriam al Doctor Thomes tenia muchas expectativas frente a ese lugar. Quería llegar rápido, así que a las 6 AM ya estaba en el puerto de Sant Adrià de Besòs, le pregunte al primer hombre que pasaba cerca por el tal Gabriel y enseguida me explico como llegar a la embarcación de él. Cuando llegue a Melancolía, había un hombre de unos 50 años limpiando varios objetos y organizándolos en un baúl. Me le presente, con mi identidad falsa, y le conté del falso motivo de mi viaje rumbo a Alejandría, cuando escucho el apellido Thomes se entusiasmo mucho, me comento que admiraba mucho a este arqueólogo y que estaba muy agradecido con él porque gracias al proyecto en Pro del Templo de Abu Simbel, lo pudo conocer. Aceptó llevarme hasta Alejandría y me pidió mucho menos dinero de lo que yo esperaba por el viaje. Guardo rápidamente lo que estaba limpiando y comenzó a preparar la embarcación, a las 9 AM zarpamos.

Soy un hombre muy precavido, y bastante cerrado en lo que entablar conversación con desconocidos se refiere, y especialmente con otros hombres. Pero con este señor las cosas fueron bien diferentes, en cuestión de minutos ya estaba hablando abiertamente con él. Me contaba de su experiencia al conocer el Templo de Abu Simbel y cuanto lo impacto, también lo mucho que le agradecía a mi padre, incluso llego a comentar mi parecido físico con él, cosa que me puso un poco nervioso porque no pensaba revelarle mi verdadera identidad a nadie, pero sin importar eso seguí conversando con este tipo. Yo le conté sobre mi solitaria vida adolescente, sobre mi agitada vida social y mis expectativas en la arqueología y lo muy alto que deseaba llegar (fue muy difícil contar mi vida sin nombrar la identidad de mis padres, creo que Gabriel debió quedar con alguna sospecha en cuanto a mi identidad). Me contó varias historias sobre personas que conocía y creo que hablamos durante todo el camino. El caso fue que entre historia e historia, muchos cigarrillos y unos cuantos tragos llegamos rápidamente a Alejandría.

miércoles, 7 de abril de 2010

INT. EXT. BAR DEL HOTEL RUSSELL. NOCHE





GUYBRUSH, 26, tez blanca, sin barba, vestido con un traje elegante y a su medida, abre la puerta corrediza del bar, echa un vistazo alredor, ve 3 mesas ocupadas y toda la barra libre, suena The way you look tonight de Frank Sinatra, GUYBRUSH mira al barman, ARNOLD, 39, caucasico, con bigote, vestido de blanco y con un delantal negro, lo saluda mientras camina hacia él, se sienta, se quita su abrigo y lo pone en el espaldar de la silla.

GUYBRUSH
¡Buenas noches, ARNOLD!

ARNOLD
¿Cómo esta Señor Arqueólogo?

GUYBRUSH
Un poco cansado de la semana, y muriéndome por un Black Label en las rocas y un Marlboro Rojo.

ARNOLD
Claro, ya se lo traigo.

GUYBRUSH toma un trago de whisky, enciende su cigarrillo y se queda en silencio saboreando su trago. Voltea la mirada hacia la ventana que da al parque Russell, mira como la luna llena alumbra el nocturno paisaje del parque. Deja de mirar por la ventana cuando ve que su trago esta vacío, mira a ARNOLD que esta al otro lado de la barra.

GUYBRUSH
ARNOLD, tráeme otro igual por favor.

ARNOLD
Listo. ¿Desea algo más?

GUYBRUSH
Pues si. ¿No hay algún trago en este bar que acabe con la frustración?

ARNOLD
Creo que no lo tenemos aun. Frustración, ¿Por qué?

GUYBRUSH
Porque hace más de un año que he terminado mis estudios, y no he logrado irme de expedición. Comparándome con la carrera de mi padre, ya estaba terminando la segunda.

ARNOLD
Creo que no tiene porque compararse con su padre, usted es usted y nadie más. Además como decía mi abuelo: "La paciencia es un árbol de raíces amargas pero de dulces frutos."

GUYBRUSH
Ojala tengas razón ARNOLD.

ARNOLD se mueve para atender a una mujer que acaba de bajar del ascensor.

GUYBRUSH mira su vaso de whisky que esta casi vacío. Se toma el último trago, apaga su cigarrillo, cruza los brazos y observa otra vez la ventana que da al parque, mira fijamente hacía la oscuridad por un minuto.

GUYBRUSH vuelve a la realidad al percatarse que alguien acaba de entrar al bar, voltea su mirada y ve a un hombre parado, mirándolo fijamente. El hombre LATINO, de estatura media, cabello corto y negro, viste un traje que parece ser muy costoso.

El LATINO se acerca a la barra lejos de donde esta GUYBRUSH, le dice algo a ARNOLD y esté le trae un puro y un vaso con algún trago. El LATINO le vuelve decir algo a ARNOLD mientras observa fijamente a GUYBRUSH, ARNOLD voltea a mirar también a GUYBRUSH y asiente con la cabeza. El LATINO toma un trago de su vaso sin dejar de mirar a GUYBRUSH, saca su teléfono celular y sale del bar mientras teclea en él, deja el vaso y el puro apenas comenzados.

GUYBRUSH mira hacia la puerta mientras se cierra y con cara de asustado busca a ARNOLD.

GUYBRUSH
¡ARNOLD! ¿Qué estaba preguntando?

ARNOLD
Pregunto por usted. Dijo que llevaba bastante buscándolo.

GUYBRUSH
¡Muy raro! ARNOLD aquí esta lo que te debo, quédese con lo que sobre.

ARNOLD
Gracias.

GUYBRUSH deja sobre la barra un billete de 50 libras, coje su abrigo en la mano y camina rápidamente hacia la otra salida que da a un callejón junto al parque Russell, abre la puerta y se encuentra de frente con el LATINO que estaba a punto de entrar. Esté mira fijamente a GUYBRUSH a los ojos durante unos segundos y le extiende la mano derecha en un gesto amigable.

Viaje a Alejandría




Para: solemanu@gmail.com
De: gguuyy@gmail.com
Asunto: La vida nos vuelve a alejar

Hola manú,

Creo que te debo una explicación, después de ese indescriptible día que nos encontramos en el café las cosas en mi vida cambiaron. No te imaginas lo bien que me sentí al volverte a ver, al volver a charlar contigo, al volverte a sentir tan cerca, al volverte a tener…

Irónicamente a la mañana siguiente que llegue a mi oficina conocí datos muy importantes que me servirían para mi vida. Estos datos me exigían un viaje urgente, tan urgente que no me dio tiempo ni siquiera de despedirme de ti.

Por cosas de la vida, recibí un correo que me ponía al tanto de un centro de estudios en honor a mi padre, creado por sus discípulos (que triste, ¿No debería yo ser uno de esos discípulos desde el principio?), con el objetivo de investigar y conservar los grandes descubrimientos del Arqueólogo Thomes. Esté centro de estudios se encuentra situado en Alejandría, en la información inicial no se mencionaba ni el lugar exacto, ni el nombre, pero sí me daba la ubicación de uno de los lideres de está iniciativa. Este líder se encontraba trabajando cerca del área urbana de Barcelona, en Sant Adrià de Besòs. ¿Quien se imaginaria que tendría que visitar la ciudad que mas te apasiona en el mundo por un asunto mío?

Hable con este señor en Sant Adrià de Besòs, pero no me presente con mi verdadero nombre para que no me identificaran como el hijo de quien ellos honran. Me presente como un entusiasta arqueólogo recién graduado que admiraba al Arqueólogo Thomes y quería aprender de él todo lo que pudiera. Este señor me recibió con mucha hospitalidad y me indico el nombre del centro de estudios y su ubicación exacta, también me informo que en ese puerto existía una embarcación llamada Melancolía, perteneciente a un tal Gabriel, que me podría llevar a Alejandría por un bajo precio.

Al día siguiente de esa reunión encontré a Gabriel, quien resultó sentir gran admiración y agradecimiento con mi padre gracias a uno de sus proyectos, el traslado del Templo de Abu Simbel en el 59. Gabriel fue muy amable conmigo y me cobro muy poco por el largo viaje, también fue una muy buena compañía y me ayudo a distraerme un poco de las expectativas que tenia frente al centro de estudios, me contó algunas de sus historias de marinero que fueron muy interesantes. La próxima vez que te escriba te contare algo de esas historias porque me estoy extendiendo ya mucho.

Como ves, irónicamente ahora a mí fue que me toco distanciarme por motivos de fuerza mayor, espero que me entiendas. Cuando termine mi labor aquí te buscare personalmente, te mando un abrazo y un beso desde El Centro de Estudios In Memoriam al Doctor Thomes en Alejandría, Egipto.

Postdata: Esta semana les contare a todos la verdad de mi descendencia, deséame suerte.

Atentamente, Guybrush Thomes

sábado, 3 de abril de 2010

INT. BAR DEL HOTEL RUSSELL. NOCHE




GUYBRUSH abre la puerta corrediza del bar, echa un vistazo completo a todo el bar, hay 3 mesas ocupadas y toda la barra esta libre, suena The way you look tonight de Frank Sinatra, GUYBRUSH engancha mirada con EL BARMAN y le hace un gesto de saludo con la ceja mientras camina hacia él, llega a la barra se sienta justo en frente del BARMAN, se quita su abrigo y lo pone en el espaldar de la silla y alza la mirada hacia el BARMAN.

GUYBRUSH
¡Buenas noches Señor BARMAN!

BARMAN
¿Cómo esta Señor Arqueólogo?

GUYBRUSH
Muy bien, un poco cansado de la semana, y muriéndome por un Black Label en las rocas acompañado de una media de Marlboro Rojo.

BARMAN
Como desee Señor.

Sentado en la barra GUYBRUSH toma un trago de whisky, enciende su primer cigarrillo con ayuda del BARMAN y se queda en silencio saboreando su trago. Voltea su cabeza hacia la derecha y mira hacia la ventana que da al parque Russell, mira como la luna llena alumbra el nocturno paisaje del parque. Deja de mirar por dicha ventana cuando se percata que su trago esta vacío, mira al BARMAN que esta al otro lado de la barra.

GUYBRUSH
BARMAN, tráeme otro trago igual por favor.

BARMAN
Enseguida Señor.

BARMAN
Listo. ¿Desea algo más?

GUYBRUSH
De hecho si. ¿Me podrías decir si existe algún trago en los estantes de este bar que acabe con la frustración?

BARMAN
Creo que no lo tenemos aun, pero ¿Frustración debido a que Señor Arqueólogo?

El BARMAN se sirve un whisky igual al de GUYBRUSH, toma un trago y se dispone a oír la respuesta.




GUYBRUSH
Debido a que hace más de un año que he terminado mis estudios en Arqueología, y aun no he logrado conseguir fondos para embarcarme en alguna expedición.
Ya he presentado dos peticiones de fondos para una expedición que estoy planeando desde que cursaba la mitad de mi carrera, una a la Fundación Rockefeller de Nueva York y la otra al Museo Británico, las dos me han sido negadas… lo más frustrante es que si comparo mi carrera con la del egoísta de mi padre, año y medio después de graduarse ya se preparaba para embarcarse en su segunda expedición…

BARMAN
No se desespere Señor Arqueólogo, el hecho de que su padre haya comenzado a expedicionar rápidamente al graduarse no significa que su camino tenga que ser igual, además recuerde que la paciencia es un árbol de raíces amargas pero de dulces frutos.

GUYBRUSH
Que el destino te oiga sabio BARMAN.

El BARMAN se mueve al otro extremo de la barra para atender a una mujer que acaba de bajar del ascensor.

GUYBRUSH mira fijamente su vaso de whisky en las rocas que esta casi vacío. Se toma el último trago de ese vaso, apaga su cigarrillo y cruza los brazos, mientras voltea su cabeza y observa otra vez la ventana que da al parque, en la que extravía su mirada en el tenue paisaje.

GUYBRUSH vuelve a la realidad al escuchar el sonido de la puerta corrediza y percatarse de que alguien a entrado al bar, voltea su mirada hacia la entrada y ve a un hombre parado en ella mirándolo fijamente. El hombre es de apariencia latina, estatura media, cabello corto y negro, viste un traje que parece ser muy costoso y un gran reloj de oro.

El LATINO se dirige hacia la barra, al otro extremo de donde esta GUYBRUSH, le dice algo al BARMAN y esté le trae un puro y un vaso de ron. El LATINO le vuelve decir algo al BARMAN mientras observa fijamente a GUYBRUSH, el BARMAN voltea a mirar también a GUYBRUSH y asiente con la cabeza, luego se retira. El LATINO toma un trago de su RON sin dejar de mirar a GUYBRUSH, saca su teléfono celular y sale del bar mientras teclea en él, deja su trago entero y el puro a la mitad en el cenicero.

GUYBRUSH mira hacia la puerta mientras se cierra y con cara de asustado busca al BARMAN.

GUYBRUSH
¡BARMAN! ¿Qué te pregunto ese hombre tan extraño?

BARMAN
Pregunto si tú eras el hijo del afamado Doctor Thomes, cuando le dije que lo eras, me comento que hace tiempo que te andaba buscando por todo Londres e inmediatamente salio corriendo a llamar a alguien.

GUYBRUSH
Demasiado extraño. Mira Señor BARMAN aquí esta lo que te debo, puede conservar el cambio.

BARMAN
¡Pero! ... Perdóneme si le molesto…

GUYBRUSH deja sobre la barra un billete de 50 libras, coje su abrigo en la mano y camina rápidamente hacia la salida que da a un callejón junto al parque Russell, abre la puerta y se encuentra de frente con el LATINO que estaba a punto de entrar. Esté mira fijamente a GUYBRUSH a los ojos durante unos segundos y le extiende la mano derecha en un gesto amigable.